domingo, 26 de octubre de 2008

¿CUAL ES LA SANTA CENA DEL SEÑOR?

Exodo 16:4Y Jehová dijo á Moisés: He aquí yo os haré llover pan del cielo; y el pueblo saldrá, y cogerá para cada un día, para que yo le pruebe si anda en mi ley, ó no.
16:15Y viéndolo los hijos de Israel, se dijeron unos á otros: ¿Qué es esto? porque no sabían qué era. Entonces Moisés les dijo: Es el pan que Jehová os da para comer.
Nehemías 9:15Y dísteles pan del cielo en su hambre, y en su sed les sacaste aguas de la piedra; y dijísteles que entrasen á poseer la tierra, por la cual alzaste tu mano que se la habías de dar.
Mateo 4:4Mas él respondiendo, dijo: Escrito está: No con solo el pan vivirá el hombre, mas con toda palabra que sale de la boca de Dios.
Deuteronomio 8:3 Y te afligió, é hízote tener hambre, y te sustentó con maná, comida que no conocías tú, ni tus padres la habían conocido; para hacerte saber que el hombre no vivirá de solo pan, mas de todo lo que sale de la boca de Jehová vivirá el hombre.
Mateo 6:11Danos hoy nuestro pan cotidiano.
15:26Y respondiendo él, dijo: No es bien tomar el pan de los hijos, y echarlo á los perrillos.
Marcos 7:27Más Jesús le dijo: Deja primero hartarse los hijos, porque no es bien tomar el pan de los hijos y echarlo á los perrillos.
Marcos 8:4Y sus discípulos le respondieron: ¿De dónde podrá alguien hartar á estos de pan aquí en el desierto?
Lucas 14:15Y oyendo esto uno de los que juntamente estaban sentados á la mesa, le dijo: Bienaventurado el que comerá pan en el reino de los cielos.
Juan 6:26Respondióles Jesús, y dijo; De cierto, de cierto os digo, que me buscáis, no porque habéis visto las señales, sino porque comisteis el pan y os hartasteis.
6:31Nuestros padres comieron el maná en el desierto, como está escrito: Pan del cielo les dió á comer.
6:32Y Jesús les dijo: De cierto, de cierto os digo: No os dió Moisés pan del cielo; mas mi Padre os da el verdadero pan del cielo.
6:33Porque el pan de Dios es aquel que descendió del cielo y da vida al mundo.
6:35Y Jesús les dijo: Yo soy el pan de vida: el que á mí viene, nunca tendrá hambre; y el que en mí cree, no tendrá sed jamás.
JUAN6:41Murmuraban entonces de él los Judíos, porque había dicho: Yo soy el pan que descendí del cielo.
Juan 6:48Yo soy el pan de vida.
Juan 6:50Este es el pan que desciende del cielo, para que el que de él comiere, no muera.
Juan 6:51Yo soy el pan vivo que he descendido del cielo: si alguno comiere de este pan, vivirá para siempre; y el pan que yo daré es mi carne, la cual yo daré por la vida del mundo.
Juan 6:58Este es el pan que descendió del cielo: no como vuestros padres comieron el maná, y son muertos: el que come de este pan, vivirá eternamente.
1 Corintios 10:16La copa de bendición que bendecimos, ¿no es la comunión de la sangre de Cristo? El pan que partimos, ¿no es la comunión del cuerpo de Cristo?
1 Corintios 11:27De manera que, cualquiera que comiere este pan ó bebiere esta copa del Señor indignamente, será culpado del cuerpo y de la sangre del Señor.
HEBREOS10:10En la cual voluntad somos santificados por la ofrenda del cuerpo de Jesucristo hecha una sola vez.
JUAN15:1YO soy la vid verdadera, y mi Padre es el labrador.
15:2Todo pámpano que en mí no lleva fruto, le quitará: y todo aquel que lleva fruto, le limpiará, para que lleve más fruto.
15:3Ya vosotros sois limpios por la palabra que os he hablado.
15:4Estad en mí, y yo en vosotros. Como el pámpano no puede llevar fruto de sí mismo, si no estuviere en la vid; así ni vosotros, si no estuviereis en mí.
15:5Yo soy la vid, vosotros los pámpanos: el que está en mí, y yo en Él, éste lleva mucho fruto; porque sin mí nada podéis hacer.
15:6El que en mí no estuviere, será echado fuera como mal pámpano, y se secará; y los cogen, y los echan en el fuego, y arden.
15:7Si estuviereis en mí, y mis palabras estuvieren en vosotros, pedid todo lo que quisiereis, y os será hecho.
1 CORINTIOS11:19Porque preciso es que haya entre vosotros aun herejías, para que los que son probados se manifiesten entre vosotros.
11:20Cuando pues os juntáis en uno, esto no es comer la cena del Señor.
11:21Porque cada uno toma antes para comer su propia cena; y el uno tiene hambre, y el otro está embriagado.
11:22Pues qué, ¿no tenéis casas en que comáis y bebáis? ¿ó menospreciáis la iglesia de Dios, y avergonzáis á los que no tienen? ¿Qué os diré? ¿os alabaré? En esto no os alabo.
11:23Porque yo recibí del Señor lo que también os he enseñado: Que el Señor Jesús, la noche que fué entregado, tomó pan;
11:24Y habiendo dado gracias, lo partió, y dijo: Tomad, comed: esto es mi cuerpo que por vosotros es partido: haced esto en memoria de mí.
11:25Asimismo tomó también la copa, después de haber cenado, diciendo: Esta copa es el nuevo pacto en mi sangre: haced esto todas las veces que bebiereis, en memoria de mí.
11:26Porque todas las veces que comiereis este pan, y bebiereis esta copa, la muerte del Señor anunciáis hasta que venga.
11:27De manera que, cualquiera que comiere este pan ó bebiere esta copa del Señor indignamente, será culpado del cuerpo y de la sangre del Señor.

11:28Por tanto, pruébese cada uno á sí mismo, y coma así de aquel pan, y beba de aquella copa.
11:29Porque el que come y bebe indignamente, juicio come y bebe para sí, no discerniendo el cuerpo del Señor.
HEBREOS10:16Y este es el pacto que haré con ellos Después de aquellos días, dice el Señor: Daré mis leyes en sus corazones, Y en sus almas las escribiré:
10:17Añade: Y nunca más me acordaré de sus pecados é iniquidades.

10:18Pues donde hay remisión de éstos, no hay más ofrenda por pecado.
10:19Así que, hermanos, teniendo libertad para entrar en el santuario por la sangre de Jesucristo,
10:20Por el camino que Él nos consagró nuevo y vivo, por el velo, esto es, por su carne;
10:21Y teniendo un gran sacerdote sobre la casa de Dios,
10:22Lleguémonos con corazón verdadero, en plena certidumbre de fe, purificados los corazones de mala conciencia, y lavados los cuerpos con agua limpia.
10:23Mantengamos firme la profesión de nuestra fe sin fluctuar; que fiel es el que prometió:
10:24Y considerémonos los unos á los otros para provocarnos al amor y á las buenas obras;
JUAN12:46Yo la luz he venido al mundo, para que todo aquel que cree en mí no permanezca en tinieblas. </span>
12:47Y el que oyere mis palabras, y no las creyere, yo no le juzgo; porque no he venido á juzgar al mundo, sino á salvar al mundo.
12:48El que me desecha, y no recibe mis palabras, tiene quien le juzgue: la palabra que he hablado, ella le juzgará en el día postrero.

MATEO26:26Y comiendo ellos, tomó Jesús el pan, y bendijo, y lo partió, y dió á sus discípulos, y dijo: Tomad, comed. esto es mi cuerpo.
26:27Y tomando el vaso, y hechas gracias, les dió, diciendo: Bebed de Él todos;
26:28Porque esto es mi sangre del nuevo pacto, la cual es derramada por muchos para remisión de los pecados.
MARCOS14:22Y estando ellos comiendo, tomó Jesús pan, y bendiciendo, partió y les dió, y dijo: Tomad, esto es mi cuerpo.
14:23Y tomando el vaso, habiendo hecho gracias, les dió: y bebieron de Él todos.
14:24Y les dice: Esto es mi sangre del nuevo pacto, que por muchos es derramada.
LUCAS22:15Y les dijo: En gran manera he deseado comer con vosotros esta pascua antes que padezca;
22:16Porque os digo que no comeré más de ella, hasta que se cumpla en el reino de Dios. 22:17Y tomando el vaso, habiendo dado gracias, dijo: Tomad esto, y partidlo entre vosotros;
22:18Porque os digo, que no beberé más del fruto de la vid, hasta que el reino de Dios venga. 22:19Y tomando el pan, habiendo dado gracias, partió, y les dió, diciendo: Esto es mi cuerpo, que por vosotros es dado: haced esto en memoria de mí.
22:20Asimismo también el vaso, después que hubo cenado, diciendo: Este vaso es el nuevo pacto en mi sangre, que por vosotros se derrama.

JUAN13:4Levántase de la cena, y quítase su ropa, y tomando una toalla, ciñóse.
13:5Luego puso agua en un lebrillo, y comenzó á lavar los pies de los discípulos, y á limpiarlos con la toalla con que estaba ceñido.
13:6Entonces vino á Simón Pedro; y Pedro le dice: ¿Señor, tú me lavas los pies?
13:7Respondió Jesús, y díjole: Lo que yo hago, tú no entiendes ahora; mas lo entenderás después.
13:8Dícele Pedro: No me lavarás los pies jamás. Respondióle Jesús: Si no te lavare, no tenrás parte conmigo.
JUAN12:25El que ama su vida, la perderá; y el que aborrece su vida en este mundo, para vida eterna la guardará.

12:26Si alguno me sirve, sígame: y donde yo estuviere, allí también estará mi servidor. Si alguno me sirviere, mi Padre le honrará.
JUAN12:38Para que se cumpliese el dicho que dijo el profeta Isaías: ¿Señor, quién ha creído á nuestro dicho? ¿Y el brazo del Señor, á quién es revelado?
12:39Por esto no podían creer, porque otra vez dijo Isaías:
12:40Cegó los ojos de ellos, y endureció su corazón; Porque no vean con los ojos, y entiendan de corazón, Y se conviertan, Y yo los sane.
12:41Estas cosas dijo Isaías cuando vió su gloria, y habló de Él.
JUAN12:45Y el que me ve, ve al que me envió.
12:46Yo la luz he venido al mundo, para que todo aquel que cree en mí no permanezca en tinieblas.
12:47Y el que oyere mis palabras, y no las creyere, yo no le juzgo; porque no he venido á juzgar al mundo, sino á salvar al mundo.
12:48El que me desecha, y no recibe mis palabras, tiene quien le juzgue: la palabra que he hablado, ella le juzgará en el día postrero.

2 TESALONISENSES
2:16Y el mismo Señor nuestro Jesucristo, y Dios y Padre nuestro, el cual nos amó, y nos dió consolación eterna, y buena esperanza por gracia,
2:17Consuele vuestros corazones, y os confirme en toda buena palabra y obra.

miércoles, 15 de octubre de 2008

SANTIFICADOS

SANTIFICADOS . (CONCORDANCIA BIBLICA)

¿COMO ES QUE NOS SANTIFICAMOS? SEGÚN LA BIBLIA.

JUAN
17:17Santifícalos en tu verdad: tu palabra es verdad.
ROMANOS
6:17Empero gracias á Dios, que aunque fuisteis siervos del pecado, habéis obedecido de corazón á aquella forma de doctrina á la cual sois entregados;
6:18Y libertados del pecado, sois hechos siervos de la justicia.
6:19Humana cosa digo, por la flaqueza de vuestra carne: que como para iniquidad presentasteis vuestros miembros á servir á la inmundicia y á la iniquidad, así ahora para santidad presentéis vuestros miembros á servir á la justicia.
6:20Porque cuando fuisteis siervos del pecado, erais libres acerca de la justicia.
6:21¿Qué fruto, pues, teníais de aquellas cosas de las cuales ahora os avergonzáis? porque el fin de ellas es muerte.
6:22Mas ahora, librados del pecado, y hechos siervos á Dios, tenéis por vuestro fruto la santificación, y por fin la vida eterna.
6:23Porque la paga del pecado es muerte: mas la dádiva de Dios es vida eterna en Cristo Jesús Señor nuestro.
1 TESALONISENSES
4:1RESTA pues, hermanos, que os roguemos y exhortemos en el Señor Jesús, que de la manera que fuisteis enseñados de nosotros de cómo os conviene andar, y agradar á Dios, así vayáis creciendo.
4:2Porque ya sabéis qué mandamientos os dimos por el Señor Jesús.
4:3Porque la voluntad de Dios es vuestra santificación: que os apartéis de fornicación;
4:4Que cada uno de vosotros sepa tener su vaso en santificación y honor;
4:5No con afecto de concupiscencia, como los Gentiles que no conocen á Dios:
4:6Que ninguno oprima, ni engañe en nada á su hermano: porque el Señor es vengador de todo esto, como ya os hemos dicho y protestado.
4:7Porque no nos ha llamado Dios á inmundicia, sino á santificación.
2 TESALONISENSES
2:13Mas nosotros debemos dar siempre gracias á Dios por vosotros, hermanos amados del Señor, de que Dios os haya escogido desde el principio para salud, por la santificación del Espíritu y fe de la verdad:
2:14A lo cual os llamó por nuestro evangelio, para alcanzar la gloria de nuestro Señor Jesucristo.
2:15Así que, hermanos, estad firmes, y retened la doctrina que habéis aprendido, sea por palabra, ó por carta nuestra.
2:16Y el mismo Señor nuestro Jesucristo, y Dios y Padre nuestro, el cual nos amó, y nos dió consolación eterna, y buena esperanza por gracia,
2:17Consuele vuestros corazones, y os confirme en toda buena palabra y obra.
1 PEDRO
1:2Elegidos según la presciencia de Dios Padre en santificación del Espíritu, para obedecer y ser rociados con la sangre de Jesucristo: Gracia y paz os sea multiplicada.
1 CORINTIO
1:2A la iglesia de Dios que está en Corinto, santificados en Cristo Jesús, llamados santos, y á todos los que invocan el nombre de nuestro Señor Jesucristo en cualquier lugar, Señor de ellos y nuestro:
JUDAS
1:1JUDAS, siervo de Jesucristo, y hermano de Jacobo, á los llamados, santificados en Dios Padre, y conservados en Jesucristo:
1:2Misericordia, y paz, y amor os sean multiplicados.
1:3Amados, por la gran solicitud que tenía de escribiros de la común salud, me ha sido necesario escribiros amonestándoos que contendáis eficazmente por la fe que ha sido una vez dada á los santos.
LEVITICO
20:7Santificaos, pues, y sed santos, porque yo Jehová soy vuestro Dios.
20:8Y guardad mis estatutos, y ponedlos por obra: Yo Jehová que os santifico.

22:31Guardad pues mis mandamientos, y ejecutadlos: Yo Jehová.
22:32Y no amancilléis mi santo nombre, y yo me santificaré en medio de los hijos de Israel: Yo Jehová que os santifico;
22:33Que os saqué de la tierra de Egipto, para ser vuestro Dios: Yo Jehová.
ISAIAS (ESCUDRIÑE ¿PARA QUE TIEMPO ES ESTA PROFESIA?)
5:16Mas Jehová de los ejércitos será ensalzado en juicio, y el Dios Santo será santificado con justicia.

8:13A Jehová de los ejércitos, á él santificad: sea él vuestro temor, y él sea vuestro miedo.
8:14Entonces él será por santuario; mas á las dos casas de Israel por piedra para tropezar, y por tropezadero para caer, y por lazo y por red al morador de Jerusalem.
8:15Y muchos tropezarán entre ellos, y caerán, y serán quebrantados: enredaránse, y serán presos.
8:16Ata el testimonio, sella la ley entre mis discípulos.
8:17Esperaré pues á Jehová, el cual escondió su rostro de la casa de Jacob, y á él aguardaré.

29:22Por tanto, Jehová que redimió á Abraham, dice así á la casa de Jacob: No será ahora confundido Jacob, ni su rostro se pondrá pálido;
29:23Porque verá á sus hijos, obra de mis manos en medio de sí, que santificarán mi nombre; y santificarán al Santo de Jacob, y temerán al Dios de Israel.
29:24Y los errados de espíritu aprenderán inteligencia, y los murmuradores aprenderán doctrina.
JEREMIAS
1:4Fué pues palabra de Jehová á mí, diciendo:
1:5Antes que te formase en el vientre te conocí, y antes que salieses de la matriz te santifiqué, te dí por profeta á las gentes.
1:6Y yo dije: ¡Ah! ¡ah! ¡Señor Jehová! He aquí, no sé hablar, porque soy niño.
1:7Y díjome Jehová: No digas, soy niño; porque á todo lo que te enviaré irás tú, y dirás todo lo que te mandaré.
1:8No temas delante de ellos, porque contigo soy para librarte, dice Jehová.
1:9Y extendió Jehová su mano, y tocó sobre mi boca; y díjome Jehová: He aquí he puesto mis palabras en tu boca.
1:10Mira que te he puesto en este día sobre gentes y sobre reinos, para arrancar y para destruir, y para arruinar y para derribar, y para edificar y para plantar.
EZEQUIEL
36:23Y santificaré mi grande nombre profanado entre las gentes, el cual profanasteis vosotros en medio de ellas; y sabrán las gentes que yo soy Jehová, dice el Señor Jehová, cuando fuere santificado en vosotros delante de sus ojos.
36:24Y yo os tomaré de las gentes, y os juntaré de todas las tierras, y os traeré á vuestro país.
36:25Y esparciré sobre vosotros agua limpia, y seréis limpiados de todas vuestras inmundicias; y de todos vuestros ídolos os limpiaré.
36:26Y os daré corazón nuevo, y pondré espíritu nuevo dentro de vosotros; y quitaré de vuestra carne el corazón de piedra, y os daré corazón de carne.
36:27Y pondré dentro de vosotros mi espíritu, y haré que andéis en mis mandamientos, y guardéis mis derechos, y los pongáis por obra.
36:28Y habitaréis en la tierra que dí á vuestros padres; y vosotros me seréis por pueblo, y yo seré á vosotros por Dios.
36:29Y os guardaré de todas vuestras inmundicias; y llamaré al trigo, y lo multiplicaré, y no os daré hambre.
36:30Multiplicaré asimismo el fruto de los árboles, y el fruto de los campos, porque nunca más recibáis oprobio de hambre entre las gentes.
36:31Y os acordaréis de vuestros malos caminos, y de vuestras obras que no fueron buenas; y os avergonzaréis de vosotros mismos por vuestras iniquidades, y por vuestras abominaciones.
36:32No lo hago por vosotros, dice el Señor Jehová, séaos notorio: avergonzaos y confundíos de vuestras iniquidades, casa de Israel.
36:33Así ha dicho el Señor Jehová: El día que os limpiaré de todas vuestras iniquidades, haré también habitar las ciudades, y las asoladas serán edificadas.
36:34Y la tierra asolada será labrada, en lugar de haber sido asolada en ojos de todos los que pasaron;
MATEO
6:9Vosotros pues, oraréis así: Padre nuestro que estás en los cielos, santificado sea tu nombre.
6:10Venga tu reino. Sea hecha tu voluntad, como en el cielo, así también en la tierra.
JUAN
17:17Santifícalos en tu verdad: tu palabra es verdad.
17:18Como tú me enviaste al mundo, también los he enviado al mundo.
17:19Y por ellos yo me santifico á mí mismo, para que también ellos sean santificados en verdad.
17:20Mas no ruego solamente por éstos, sino también por los que han de creer en mí por la palabra de ellos.
1 CORINTIOS
6:9¿No sabéis que los injustos no poseerán el reino de Dios? No erréis, que ni los fornicarios, ni los idólatras, ni los adúlteros, ni los afeminados, ni los que se echan con varones,
6:10Ni los ladrones, ni los avaros, ni los borrachos, ni los maldicientes, ni los robadores, heredarán el reino de Dios.
6:11Y esto erais algunos: mas ya sois lavados, mas ya sois santificados, mas ya sois justificados en el nombre del Señor Jesús, y por el Espíritu de nuestro Dios.
EFESIOS
5:25Maridos, amad á vuestras mujeres, así como Cristo amó á la iglesia, y se entregó á sí mismo por ella,
5:26Para santificarla limpiándola en el lavacro del agua por la palabra,
5:27Para presentársela gloriosa para sí, una iglesia que no tuviese mancha ni arruga, ni cosa semejante; sino que fuese santa y sin mancha.
1 TESALONISENSES
5:20No menospreciéis las profecías.
5:21Examinadlo todo; retened lo bueno.
5:22Apartaos de toda especie de mal.
5:23Y el Dios de paz os santifique en todo; para que vuestro espíritu y alma y cuerpo sea guardado entero sin reprensión para la venida de nuestro Señor Jesucristo.
1 TIMOTEO
4:5Porque por la palabra de Dios y por la oración es santificado.
4:6Si esto propusieres á los hermanos, serás buen ministro de Jesucristo, criado en las palabras de la fe y de la buena doctrina, la cual has alcanzado.
4:7Mas las fábulas profanas y de viejas desecha, y ejercítate para la piedad.
4:8Porque el ejercicio corporal para poco es provechoso; mas la piedad para todo aprovecha, pues tiene promesa de esta vida presente, y de la venidera.
4:9Palabra fiel es esta, y digna de ser recibida de todos.
4:10Que por esto aun trabajamos y sufrimos oprobios, porque esperamos en el Dios viviente, el cual es Salvador de todos los hombres, mayormente de los que creen.
4:11Esto manda y enseña.
HEBREOS
2:11Porque el que santifica y los que son santificados, de uno son todos: por lo cual no se avergüenza de llamarlos hermanos,
2:12Diciendo: Anunciaré á mis hermanos tu nombre, En medio de la congregación te alabaré.
2:13Y otra vez: Yo confiaré en Él. Y otra vez: He aquí, yo y los hijos que me dió Dios.

10:9Entonces dijo: Heme aquí para que haga, oh Dios, tu voluntad. Quita lo primero, para establecer lo postrero.
10:10En la cual voluntad somos santificados por la ofrenda del cuerpo de Jesucristo hecha una sola vez.

13:12Por lo cual también Jesús, para santificar al pueblo por su propia sangre, padeció fuera de la puerta.
13:13Salgamos pues á Él fuera del real, llevando su vituperio.
13:14Porque no tenemos aquí ciudad permanente, mas buscamos la por venir.
13:15Así que, ofrezcamos por medio de Él á Dios siempre sacrificio de alabanza, es á saber, fruto de labios que confiesen á su nombre.
13:16Y de hacer bien y de la comunicación no os olvidéis: porque de tales sacrificios se agrada Dios.
1 PEDRO
3:14Mas también si alguna cosa padecéis por hacer bien, sois bienaventurados. Por tanto, no temáis por el temor de ellos, ni seáis turbados;
3:15Sino santificad al Señor Dios en vuestros corazones, y estad siempre aparejados para responder con mansedumbre y reverencia á cada uno que os demande razón de la esperanza que hay en vosotros:
3:16Teniendo buena conciencia, para que en lo que murmuran de vosotros como de malhechores, sean confundidos los que blasfeman vuestra buena conversación en Cristo.
3:17Porque mejor es que padezcáis haciendo bien, si la voluntad de Dios así lo quiere, que haciendo mal.
3:18Porque también Cristo padeció una vez por los injustos, para llevarnos á Dios, siendo á la verdad muerto en la carne, pero vivificado en espíritu;
JUAN
17:17Santifícalos en tu verdad: tu palabra es verdad.

BIENVENIDOS A ESTA PAGINA

SOMOS HERMANOS QUE NOS CONGREGAMOS EN LA PALABRA DEL ETERNO SEÑOR. NOS ENCONTRAMOS EN HERMOSILLO, SONORA, MEXICO.

ESTAMOS CAMINANDO EN LA SANA DOCTRINA DEL SEÑOR TRATANDO DE GUARDAR SUS MANDAMIENTOS, TAL Y COMO ESTAN ESCRITOS. EL ES EL MISMO DIOS TODOPODEROSO, LA MISMA PERSONA DEL PADRE, DEL HIJO Y DEL ESPIRITU SANTO. SOLO A EL SEA LA GLORIA LA HONRA Y LA ALABANZA POR SIEMPRE AMEN.

¿POR QUE ESTA PAGINA ?

PAZ DE CRISTO .
EL SEÑOR NOS PERMITIO CREAR ESTA PAGINA, PARA PUBLICAR SU PALABRA EN VERSICULOS: PARA QUE LOS ESCUDRIÑEMOS EN NUESTRAS BIBLIAS (CUALQUIER TRADUCCION) Y LLEGUEMOS AL CONOCIMIENTO VERDADERO DE LA SANA DOCTRINA DEL SEÑOR , Y PARA ADVERTIR DE LAS ARTIMAÑAS DEL ENEMIGO. EZEQUIEL 3:17.

NO PRETENDEMOS TENER LA VERDAD, PERO SABEMOS DONDE ESTA LA VERDAD!!! EN LAS ESCRITURAS.
Y SI LAS ESCUDRIÑAMOS DIRECTAMENTE, CON SU SANTO ESPIRITU, EL NOS AYUDARA EL SEÑOR MISMO A ENCONTRARLA. SU REVELACION, SU PALABRA.


ASI TENDREMOS SALVACION POR MEDIO DE LA GRACIA DE JESUCRISTO, VIVIENDO POR LA FE (LA PALABRA).
PRESENTANDO NUESTRO CUERPO EN SACRIFICIO VIVO SANTO Y AGRADABLE A DIOS.
YAHSUA ES EL UNICO DIOS VERDADERO EL UNICO SENTADO EN EL TRONO DE DIOS.
SABEMOS QUE ESTOS TEMAS Y VERSICULOS SON RADICALES Y EXTREMOS; ASI TAMBIEN EL SEÑOR ES EXTREMO Y NOS A DADO EL LIBRE ALBELDRIO PARA OBEDECER SU PALABRA O PONERLE PERO, EL NOS DIO DOS CAMINOS: UNO LA BIBLIA Y EL OTRO EL CAMINO ANCHO DE LOS HOMBRES.
ASI QUE DEBEMOS CAMINAR EN EL, OBEDECIENDO SU PALABRA.
LA PALABRA NOS DICE SI SOMOS O NO CRISTIANOS.
LOS CRISTIANOS ANDAN COMO EL ANDUVO.
JUAN 14:15 Y JUAN 15:14

ESTOS TEMAS SON PARA BAJARLOS GRATUITAMENTE Y PASARLOS A TODA PERSONA.

QUE EL SEÑOR LOS BENDIGA CON SU SABIDURIA.

CONVERTIMIENTO A JESUCRISTO AL UNICO DIOS VERDADERO


DEUTERONOMIO

30:2

Y te convirtieres á Jehová tu Dios, y obedecieres á su voz conforme á todo lo que yo te mando hoy, tú y tus hijos, con todo tu corazón y con toda tu alma,

30:3
Jehová también volverá tus cautivos, y tendrá misericordia de ti, y tornará á recogerte de todos los pueblos á los cuales te hubiere esparcido Jehová tu Dios.

30:4
Si hubieres sido arrojado hasta el cabo de los cielos, de allí te recogerá Jehová tu Dios, y de allá te tomará:

30:5
Y volverte ha Jehová tu Dios á la tierra que heredaron tus padres, y la poseerás; y te hará bien, y te multiplicará más que á tus padres.

30:6
Y circuncidará Jehová tu Dios tu corazón, y el corazón de tu simiente, para que ames á Jehová tu Dios con todo tu corazón y con toda tu alma, á fin de que tú vivas.

1 REYES

8:47
Y ellos volvieren en sí en la tierra donde fueren cautivos; si se convirtieren, y oraren á ti en la tierra de los que los cautivaron, y dijeren: Pecamos, hemos hecho lo malo, hemos cometido impiedad;

2 CRONICAS

6:24
Si tu pueblo Israel cayere delante de los enemigos, por haber prevaricado contra ti, y se convirtieren, y confesaren tu nombre, y rogaren delante de ti en esta casa,

7:14
Si se humillare mi pueblo, sobre los cuales ni nombre es invocado, y oraren, y buscaren mi rostro, y se convirtieren de sus malos caminos; entonces yo oiré desde los cielos, y perdonaré sus pecados, y sanaré su tierra.

SALMO

19:7
La ley de Jehová es perfecta, que vuelve el alma: El testimonio de Jehová, fiel, que hace sabio al pequeño.

51:13
Enseñaré á los prevaricadores tus caminos; Y los pecadores se convertirán á ti.

90:3
Vuelves al hombre hasta ser quebrantado, Y dices: Convertíos, hijos de los hombres.

ISAIAS

6:10
Engruesa el corazón de aqueste pueblo, y agrava sus oídos, y ciega sus ojos; porque no vea con sus ojos, ni oiga con sus oídos, ni su corazón entienda, ni se convierta, y haya para él sanidad.

19:22
Y herirá á Egipto, herirá y sanará; y se convertirán á Jehová, y les será clemente, y los sanará.

JEREMIAS

15:19
Por tanto así dijo Jehová: Si te convirtieres, yo te repondré, y delante de mí estarás; y si sacares lo precioso de lo vil, serás como mi boca. Conviértanse ellos á ti, y tú no te conviertas á ellos.

18:8
Empero si esas gentes se convirtieren de su maldad, de que habré hablado, yo me arrepentiré del mal que había pensado hacerles.

18:11
Ahora pues habla luego á todo hombre de Judá, y á los moradores de Jerusalem, diciendo: Así ha dicho Jehová: He aquí que yo dispongo mal contra vosotros, y trazo contra vosotros designios: conviértase ahora cada uno de su mal camino, y mejorad vuestros caminos y vuestras obras.

JONAS

3:8
Y que se cubran de saco los hombres y los animales, y clamen á Dios fuertemente: y conviértase cada uno de su mal camino, de la rapiña que está en sus manos.

JEREMIAS

23:14
Y en los profetas de Jerusalem he visto torpezas: cometían adulterios, y andaban en mentiras, y esforzaban las manos de los malos, para que ninguno se convirtiese de su malicia: fuéronme todos ellos como Sodoma, y sus moradores como Gomorra.

31:18
Escuchando, he oído á Ephraim que se lamentaba: Azotásteme, y fuí castigado como novillo indómito: conviérteme y seré convertido; porque tú eres Jehová mi Dios.

EZEQUIEL

14:6
Por tanto di á la casa de Israel: Así dice el Señor Jehová: Convertíos, y volveos de vuestros ídolos, y apartad vuestro rostro de todas vuestras abominaciones.

14:7
Porque cualquier hombre de la casa de Israel, y de los extranjeros que moran en Israel, que se hubiere apartado de andar en pos de mí, y hubiere puesto sus ídolos en su corazón, y establecido delante de su rostro el tropiezo de su maldad, y viniere al profeta para preguntarle por mí, yo Jehová le responderé por mí mismo:

14:8
Y pondré mi rostro contra aquel hombre, y le pondré por señal y por fábula, y yo lo cortaré de entre mi pueblo; y sabréis que yo soy Jehová.

18:30
Por tanto, yo os juzgaré á cada uno según sus caminos, oh casa de Israel, dice el Señor Jehová. Convertíos, y volveos de todas vuestras iniquidades; y no os será la iniquidad causa de ruina.

OSEAS

11:5
No tornará á tierra de Egipto, antes el mismo Assur será su rey, porque no se quisieron convertir.

11:6
Y caerá espada sobre sus ciudades, y consumirá sus aldeas; consumirálas á causa de sus consejos.

11:7
Entre tanto, está mi pueblo adherido á la rebelión contra mí: aunque lo llaman al Altísimo, ninguno absolutamente quiere ensalzar le.

JOEL

2:12
Por eso pues ahora, dice Jehová, convertíos á mí con todo vuestro corazón, con ayuno y lloro y llanto.

MATEO

13:15
Porque el corazón de este pueblo está engrosado, Y de los oídos oyen pesadamente, Y de sus ojos guiñan: Para que no vean de los ojos, Y oigan de los oídos, Y del corazón entiendan, Y se conviertan, Y yo los sane.

JUAN

12:40
Cegó los ojos de ellos, y endureció su corazón; Porque no vean con los ojos, y entiendan de corazón, Y se conviertan, Y yo los sane.

HECHOS

28:27
Porque el corazón de este pueblo se ha engrosado, Y de los oídos oyeron pesadamente, Y sus ojos taparon; Porque no vean con los ojos, Y oigan con los oídos, Y entiendan de corazón, Y se conviertan, Y yo los sane.

LUCAS

1:13
Mas el ángel le dijo: Zacarías, no temas; porque tu oración ha sido oída, y tu mujer Elisabet te parirá un hijo, y llamarás su nombre Juan.

1:14
Y tendrás gozo y alegría, y muchos se gozarán de su nacimiento.

1:15
Porque será grande delante de Dios, y no beberá vino ni sidra; y será lleno del Espíritu Santo, aun desde el seno de su madre.

1:16
Y á muchos de los hijos de Israel convertirá al Señor Dios de ellos.

HECHOS

3:19
Así que, arrepentíos y convertíos, para que sean borrados vuestros pecados; pues que vendrán los tiempos del refrigerio de la presencia del Señor,

3:26
A vosotros primeramente, Dios, habiendo levantado á su Hijo, le envió para que os bendijese, á fin de que cada uno se convierta de su maldad.

14:15
Y diciendo: Varones, ¿por qué hacéis esto? Nosotros también somos hombres semejantes á vosotros, que os anunciamos que de estas vanidades os convirtáis al Dios vivo, que hizo el cielo y la tierra, y la mar, y todo lo que está en ellos:

26:18
Para que abras sus ojos, para que se conviertan de las tinieblas á la luz, y de la potestad de Satanás á Dios; para que reciban, por la fe que es en mí, remisión de pecados y suerte entre los santificados.

1 TESALONICENSES

1:9
Porque ellos cuentan de nosotros cuál entrada tuvimos á vosotros; y cómo os convertisteis de los ídolos á Dios, para servir al Dios vivo y verdadero.

catecismo menor de Martin Lutero. DESCUBRE LO QUE DICE !!!!!!!!!

PERSONA: DESCUBRE LO QUE REDACTO EL SR. MARTIN LUTRO EN SU CATECISMO MENOR.
SI TU ERES EVANGELICO PROTESTANTE Y PERTENECES A UNA DENOMINACION; TE DARAS CUENTA DE DONDE VIENEN TODOS LOS DOGMAS PROTESTANTES CON ESTE DOCUMENTO. INVESTIGALO TU !!!

A MARTIN LUTERO SE LE CONCIDERA EL PADRE DE LOS PROTESTANTES. VERDAD?

PREGUNTA A TUS LIDERES : ¿PORQUE TIENES LOS MISMO DOGMAS ERRONEOS COMO LOS CATOLICOS ROMANOS?

ENCUENTRA LA SANA DOCTRINA DEL SEÑOR JESUCRISTO EN TU BIBLIA .

TODA LA SANA DOCTRINA VIENE TEXTUAL EN TU BIBLIA, QUE NO TE ENGAÑEN, LOS LIDERES O LAS SECTAS PROTESTANTES O ROMANAS.

ACONTINUACION :

El Catecismo menor del Dr. Martín LuteroLos Diez Mandamientos

Como un jefe de familia debe enseñarlos en forma muy sencilla a los de su casa.

El Primer Mandamiento

No tendrás dioses ajenos.

¿Qué quiere decir esto?

Mas que a todas las cosas debemos temer y amar a Dios y confiar en El.

El Segundo Mandamiento

No usarás el nombre de tu Dios en vano.

¿Qué quiere decir esto?

Debemos temer y amar a Dios de modo que no usemos su nombre para maldecir, jurar, hechizar, mentir o engañar, sino que lo invoquemos en todas las necesidades, lo adoremos, alabemos y le demos gracias.

El Tercer Mandamiento

Santificarás el día de reposo.

¿Qué quiere decir esto?

Debemos temer y amar a Dios de modo que no despreciemos la predicación y su palabra, sino que la consideremos santa, la oigamos y aprendamos con gusto.

El Cuarto Mandamiento.

Honrarás a tu padre y a tu madre.

¿Qué quiere decir esto?

Debemos temer y amar a Dios de modo que no despreciemos ni irritemos a nuestros padres y superiores, sino que los honremos, les sirvamos, obedezcamos , los amemos y tengamos en alta estima.

El Quinto Mandamiento

No matarás.

¿Qué quiere decir esto?

Debemos temer y amar a Dios de modo que no hagamos daño o mal alguno a nuestro prójimo en su cuerpo y vida, sino que le ayudemos y hagamos prosperar en todas las necesidades de su vida.

El Sexto Mandamiento

No cometerás adulterio

¿Qué quiere decir esto?

Debemos temer y amar a Dios de modo que llevemos una vida casta y decente en palabras y obras, y que cada uno ame y honre a su cónyuge.

El Séptimo Mandamiento

No hurtarás.

¿Qué quiere decir esto?

Debemos temer y amar a Dios de modo que no quitemos el dinero o los bienes de nuestro prójimo, ni nos apoderemos de ellos con mercaderías o negocios falsos, sino que le ayudemos a mejorar y conservar sus bienes y medios de vida.

El Octavo Mandamiento.

No darás falso testimonio contra tu prójimo.

¿Qué quiere decir esto?

Debemos temer y amar a Dios de modo que con mala intención, ni traicionemos, ni calumniemos, ni difamemos a nuestro prójimo, sino que lo disculpemos, hablemos bien de él e interpretemos todo en el mejor sentido.

El Noveno Mandamiento

No codiciarás la casa de tu prójimo.

¿Qué quiere decir esto?

Debemos temer y amar a Dios de modo que no tratemos de obtener con astucia la herencia o la casa de nuestro prójimo, ni nos apoderemos de ellas con apariencia de derecho, sino que le ayudemos y cooperemos con él en la conservación de lo que le pertenece.

El Décimo Mandamiento

No codiciarás la mujer de tu prójimo, ni su siervo, criada, ganado ni cosa alguna de su pertenencia.

¿Qué quiere decir esto?

Debemos temer y amar a Dios de modo que no le arrebatemos al prójimo su mujer, sus criados o sus animales, ni los alejemos, ni hagamos que lo abandonen, sino que los instemos a que permanezcan con él y cumplan con sus obligaciones.

¿Qué dice Dios de todos estos mandamientos en conjunto?

Dice así: “Yo, el Señor tu Dios, soy un Dios celoso que visito el pecado de los padres en los hijos hasta la tercera y cuarta generación de los que me aborrecen. Pero a los que me aman y guardan mis mandamientos, les hago misericordia hasta millares de generaciones.”

¿Qué quiere decir esto?

Dios amenaza con castigar a todos los que traspasan estos mandamientos. Por tanto, debemos temer su ira y no actuar en contra de dichos mandamientos. En cambio, él promete gracia y todo género de bienes a todos los que los cumplen. Por tanto, debemos amarlo y confiar en él y actuar gustosos conforme a sus mandamientos.

El Credo.

Como un jefe de familia debe enseñarlo en forma muy sencilla a los de su casa.

Artículo Primero: La Creación

Creo en Dios Padre todopoderoso, Creador del cielo y de la tierra.

¿Qué quiere decir esto?

Creo que Dios me ha creado y también a todas las criaturas; que me ha dado cuerpo y alma, ojos, oídos y todos los miembros, la razón y todos los sentidos y aún los sostiene, y además vestido y calzado, comida y bebida, casa y hogar, esposa e hijos, campos, ganado y todos los bienes; que me provee abundantemente y a diario de todo lo que necesito para sustentar este cuerpo y vida, me protege contra todo peligro y me guarda y preserva de todo mal; y todo esto por pura bondad y misericordia paternal y divina, sin que yo en manera alguna lo merezca ni sea digno de ello. Por todo esto debo darle gracias, ensalzarlo, servirle y obedecerle. Esto es con toda certeza la verdad.

Articulo Segundo: La Redención

Y en Jesucristo, su único Hijo, Nuestro Señor, que fue concebido por obra del Espíritu Santo, nació de la virgen María, padeció bajo el poder de Poncio Pilato, fue crucificado, muerto y sepultado, descendió a los infiernos, al tercer día resucitó de entre los muertos, subió a los cielos y está sentado a la diestra de Dios Padre todopoderoso, desde donde vendrá para juzgar a los vivos y a los muertos.

¿Qué quiere decir esto?

Creo que Jesucristo, verdadero Dios engendrado del Padre en la eternidad, y también verdadero hombre nacido de la virgen María, es mi Señor, que me ha redimido a mí, hombre perdido y condenado, y me ha rescatado y conquistado de todos los pecados, de la muerte y de la potestad del diablo, no con oro o plata, sino con su santa y preciosa sangre y con su inocente pasión y muerte; y todo esto lo hizo para que yo fuese suyo y viviese bajo él en su reino, y le sirviese en justicia, inocencia y bienaventuranza eternas, así como él resucitó de la muerte y vive y reina eternamente. Esto es ciertamente la verdad.

Artículo Tercero: La Santificación

Creo en el Espíritu Santo, una santa iglesia cristiana, la comunión de los santos, el perdón de los pecados, la resurrección de la carne y la vida perdurable. Amén. ¿Qué quiere decir esto?

Creo que ni por mi propia razón, ni por mis propias fuerzas soy capaz de creer en Jesucristo, mi Señor, o venir a Él; sino que el Espíritu Santo me ha llamado por medio del Evangelio, me ha iluminado con sus dones, y me ha santificado y conservado en la verdadera fe, del mismo modo como él llama, congrega, ilumina y santifica a toda la cristiandad en la tierra, y la conserva unida a Jesucristo en la verdadera y única fe: En esta cristiandad él me perdona todos los pecados a mí y a todos los creyentes, diaria y abundantemente, y en el postrer día me resucitará a mí y a todos los muertos y me dará en Cristo, juntamente con todos los creyentes, la vida eterna. Esto es ciertamente la verdad.

El Padrenuestro.

Como un jefe de familia debe enseñarlo en forma muy sencilla a los de su casa.

Padre nuestro que estás en los cielos.

¿Qué quiere decir esto?

Con esto, Dios quiere atraernos para que creamos que Él es nuestro verdadero Padre y nosotros sus verdaderos hijos, a fin de que le pidamos con valor y plena confianza, como amados hijos a su amoroso padre.

Primera Petición

Santificado sea tu nombre.

¿Qué quiere decir esto?

El nombre de Dios ya es santo de por sí; pero rogamos con esta petición que sea santificado también entre nosotros.

¿Cómo sucede esto?

Cuando la palabra de Dios es enseñada en toda su pureza, y cuando también vivimos santamente conforme a ella, como hijos de Dios. ¡Ayúdanos a que esto sea así, amado Padre celestial! Pero quien enseña y vive de manera distinta de lo que enseña la palabra de Dios, profana entre nosotros el nombre de Dios. De ello, ¡guárdanos, Padre celestial!.

Segunda Petición

Venga tu reino.

¿Qué quiere decir esto?

El reino de Dios viene en verdad por sí solo, aun sin nuestra oración. Pero rogamos con esta petición que venga también a nosotros.

¿Cómo sucede esto? Cuando el Padre celestial nos da su Espíritu Santo, para que, por su gracia, creamos su santa palabra y llevemos una vida de piedad, tanto aquí en el mundo temporal como allá en el otro, eternamente.

Tercera Petición

Hágase tu voluntad, como en el cielo, así también en la tierra.

¿Qué quiere decir esto?

La buena y misericordiosa voluntad de Dios se hace, en verdad, sin nuestra oración; pero rogamos con esta petición que se haga también entre nosotros. Cuando Dios dispersa y dificulta todo mal propósito y voluntad que tratan de impedir que santifiquemos el nombre de Dios y de obstaculizar la venida de su reino, tales como la voluntad del diablo, del mundo y de nuestra carne. Así también se hace la voluntad de Dios, cuando Él nos fortalece y nos mantiene firmes en su palabra y en la fe hasta el fin de nuestros días. Esta es su misericordia y buena voluntad.

Cuarta Petición

El pan nuestro de cada día, dánoslo hoy.

¿Qué quiere decir esto?

Dios da diariamente el pan, también sin nuestra súplica, aun a todos los malvados; pero rogamos con esta petición que él nos haga reconocer esto y así recibamos nuestro pan cotidiano con gratitud.

¿Qué es esto: el pan cotidiano?

Todo aquello que se necesita como alimento y para satisfacción de las necesidades de esta vida, como: comida, bebida, vestido, calzado, casa hogar, tierras, ganado, dinero, bienes; piadoso consorte, hijos piadosos, piadosos criados, autoridades piadosas y fieles; buen gobierno, buen tiempo; paz, salud, buen orden, buena reputación, buenos amigos, vecinos fieles y cosas semejantes a éstas.

Quinta Petición

Y perdónanos nuestras deudas así como nosotros perdonamos a nuestros deudores.

¿Qué quiere decir esto?

Con esta petición rogamos al Padre celestial que no tome en cuenta nuestros pecados ni por causa de ellos nos niegue lo que pedimos. En efecto, nosotros no somos dignos de recibir nada de lo que imploremos, ni tampoco lo hemos merecido, pero quiera Dios dárnoslo todo por su gracia, pues diariamente pecamos mucho y sólo merecemos el castigo. Así, por cierto, también por nuestra parte perdonemos de corazón, y con agrado hagamos bien a (todos) los que contra nosotros pecaren.

Sexta Petición

Y no nos dejes caer en la tentación.

¿Qué quiere decir esto?

Dios, en verdad, no tienta a nadie; pero con esta petición le rogamos que nos guarde y preserve, a fin de que el diablo, el mundo y nuestra carne no nos engañen y seduzcan, llevándonos a una fe errónea, a la desesperación y a otras grandes vergüenzas y vicios. Y aun cuando fuéremos tentados a ello, que al fin logremos vencer y retener la victoria.

Séptima Petición

Mas líbranos del mal. Porque tuyo es el reino y el poder y la gloria por los siglos de los siglos.

¿Qué quiere decir esto?

Con esta petición rogamos, como en resumen, que el Padre celestial nos libre de todo lo que pueda perjudicar nuestro cuerpo y alma, nuestros bienes y honra, y que al fin, cuando llegue nuestra última hora, nos conceda un fin bienaventurado, y, por su gracia, nos lleve de este valle de lágrimas al cielo para morar con él. Amén.

¿Qué quiere decir esto?

Que debo tener la certeza de que el Padre celestial acepta estas peticiones y las atiende; pues él mismo nos ha ordenado orar así y ha prometido atendernos. Amén, amén, quiere decir: Si, sí, que así sea.

El Sacramento del Santo Bautismo

Como un jefe de familia debe enseñarlo en forma muy sencilla a los de su casa.

¿Qué es el bautismo?

El bautismo no es simple agua solamente, sino que es agua comprendida en el mandato divino y ligada con la palabra de Dios.

¿Qué palabra de Dios es ésta?

Es la palabra que nuestro Señor Jesucristo dice en el último capítulo del Evangelio según San Mateo “Id, e instruid a todas las naciones, bautizándolas en el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo”.

¿Qué dones o beneficios confiere el bautismo?

El bautismo efectúa perdón de los pecados, redime de la muerte y del diablo y da la salvación eterna a todos los que lo creen, tal como se expresa en las palabras y promesas de Dios.

¿Qué palabras y promesas de Dios son éstas?

Son las que nuestro Señor Jesucristo dice en el último capítulo de Marcos: “El que creyere y fuere bautizado, será salvo; mas el que no creyere, será condenado.”

Cómo puede el agua hacer cosas tan grandes?

El agua en verdad no las hace, sino la palabra de Dios que está con el agua y unida a ella, y la fe que confía en dicha palabra de Dios ligada con el agua, porque sin la palabra de Dios el agua es simple agua, y no es bautismo; pero con la palabra de Dios sí es bautismo, es decir, es un agua de vida, llena de gracia, y un “lavamiento de la regeneración en el Espíritu Santo”, como San Pablo dice a Tito en el tercer capítulo: “Por el lavamiento de la regeneración y por la renovación en el Espíritu Santo, el cual derramó en nosotros abundantemente por Jesucristo nuestro Salvador, para que, justificados por su gracia, viniésemos a ser herederos de la vida eterna conforme a la esperanza de la vida eterna”.

Esto es ciertamente la verdad.

¿Qué significa este bautizar con agua?

Significa que el viejo Adán en nosotros debe ser ahogado por pesar y arrepentimientos diarios, y que debe morir con todos sus pecados y malos deseos; asimismo, también cada día debe surgir y resucitar el hombre nuevo, que ha de vivir eternamente delante de Dios en justicia y pureza.

¿Dónde está escrito esto?

San Pablo dice en Romanos, capítulo seis: “Porque somos sepultados juntamente con él para muerte por el bautismo, a fin de que como Cristo resucitó de los muertos por la gloria del Padre, así también nosotros andemos en vida nueva” Rom. 6:4.

Confesión y Absolución

Manera como se debe enseñar a la gente sencilla a confesarse.

¿Qué es la confesión?

La confesión contiene dos partes. La primera es la confesión de los pecados, y la segunda, el recibir la absolución del confesor como de Dios mismo, no dudando de ella en lo más mínimo, sino creyendo firmemente que por ella los pecados son perdonados ante Dios en el cielo.

¿Qué pecados hay que confesar?

Ante Dios uno debe declararse culpable de todos los pecados, aun de aquellos que ignoramos, tal como lo hacemos en el Padrenuestro. Pero ante el confesor debemos confesar solamente los pecados que conocemos y sentimos en nuestro corazón.

¿Cuáles son tales pecados?

Considera tu estado basándote en los Diez Mandamientos, seas padre, madre, hijo o hija, señor o señora o servidor, para saber si has sido desobediente, infiel, perezoso, violento, insolente, reñidor; si hiciste un mal a alguno con palabras u obras; si hurtaste, fuiste negligente o derrochador o causaste algún otro daño.

¡Por favor, indícame una breve manera de confesarme!

- De esta manera debes hablarle al confesor:

- Honorable y estimado señor: os pido que tengáis a bien escuchar mi confesión y declarar el perdón de mis pecados por Dios.

-Di, pues. Yo, pobre pecador, me confieso ante Dios que soy culpable de todos los pecados; especialmente me confieso ante vuestra presencia que siendo sirviente, sirvienta, etc., sirvo, lamentablemente, en forma infiel a mi amo. Pues aquí y allí no he hecho lo que me ha sido encomendado, habiéndolo movido a encolerizarse o a maldecir; he descuidado algunas cosas y he permitido que ocurran daños. He sido también impúdico en palabras y obras; me he irritado con mis semejantes y he murmurado y maldecido contra mi amo, etc. Todo esto lo lamento y solicito vuestra gracia ; quiero corregirme. Un amo o ama debe decir así: En especial confieso ante vuestra presencia que no eduqué fielmente para gloria de Dios a mi hijo, sirviente, mujer. He maldecido; he dado malos ejemplos con palabras y obras impúdicas; he hecho mal a mi vecino, hablando mal de él, vendiéndole muy caro, dándole mala mercadería y no toda la cantidad que corresponde.

En general, deberá confesarse todo lo que uno ha hecho en contra de los Diez Mandamientos, lo que corresponde según su estado, etc. Si alguien no se siente cargado de tales o aun mayores pecados, entonces no debe preocuparse o buscar más pecados ni inventarlos, haciendo con ello un martirio de la confesión, sino que debe contar uno o dos, tal como él lo sabe. De esta manera: En especial confieso que he maldecido una vez; del mismo modo, que he sido desconsiderado una vez con palabras, que he descuidado esto, etc. Considera esto como suficiente. Si no sientes ninguno (lo que no debería ser posible), entonces no debes decir nada en particular, sino recibir el perdón de la confesión general, así como lo haces ante Dios en presencia del confesor.

A ello debe responder el confesor: Dios sea contigo misericordioso; fortalezca tu fe, Amén. dime: ¿Crees tú también que mi perdón sea el perdón de Dios? Sí, venerable señor.

Entonces dirá: Así como has creído, de la misma forma acontezca en ti (Mi. 8:13). Y yo por mandato de nuestro Señor Jesucristo te perdono tus pecados en el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo, Amén. Ve en paz. (Mr. 5:34; Lc. 7:50; 8:48).

Aquellos que tengan gran carga de conciencia o estén afligidos o atribulados los sabrá consolar e impulsar hacia la fe el confesor con más pasajes bíblicos. Esta debe ser sólo una manera usual de confesión para la gente sencilla.

El Sacramento del Altar

Como un jefe de familia debe enseñarlo en forma muy sencilla a los de su casa.

¿Qué es el Sacramento del Altar?

Es el verdadero cuerpo y la verdadera sangre de nuestro Señor Jesucristo bajo el pan y el vino, instituido por Cristo mismo, para que los cristianos lo comamos y bebamos.

¿Dónde está escrito esto?

Así escriben los santos evangelistas Mateo, Marcos y Lucas, y también San Pablo: “Nuestro Señor Jesucristo, la noche en que fue entregado, tomó el pan; y habiendo dado gracias, lo partió y dio a sus discípulos, diciendo: Tomad, comed; este es mi cuerpo que por vosotros es dado. Haced esto en memoria de mí. Asimismo tomó también la copa, después de haber cenado, y habiendo dado gracias, la dio a ellos diciendo: Tomad, y bebed de ella todos; esta copa es el nuevo pacto en mi sangre, que es derramada por vosotros para remisión de los pecados. Haced esto, todas las veces que bebiereis, en memoria de mí”.¿Qué beneficios confiere el comer y beber así?

Los beneficios los indican estas palabras: “por vosotros dado” y “por vosotros derramada para perdón de los pecados”. Es decir, por estas palabras se nos da en el Sacramento perdón de pecados, vida y salvación. Porque donde hay perdón de pecados, hay también vida y salvación.

¿Cómo puede el comer y beber corporal hacer una cosa tan grande?

Ciertamente, el comer y beber no es lo que la hace, sino las palabras que están aquí escritas: “Por vosotros dado” y “por vosotros derramada para perdón de los pecados”. Estas palabras son, junto con el comer y beber corporal, lo principal en el sacramento. Y el que cree dichas palabras, tiene lo que ellas dicen y expresan; esto es: “el perdón de los pecados”.

¿Quién recibe este Sacramento dignamente?

El ayunar y prepararse corporalmente es, por cierto, una buena disciplina externa; pero verdaderamente digno y bien preparado es aquel que tiene fe en las palabras: “por vosotros dado” y “por vosotros derramada para perdón de los pecados”. Mas el que no cree estas palabras o duda de ellas, no es digno, ni está preparado; porque las palabras “por vosotros” exigen corazones enteramente creyentes.

Formas de bendición que el jefe de la Familia debe enseñar a los de su casa para la mañana y la noche.

Por la mañana, apenas hayas abandonado el lecho, te santiguarás y dirás así: “En el nombre de Dios Padre, Hijo y Espíritu Santo. Amén”. Entonces, puesto de rodillas o de pie, dirás el Credo y el Padrenuestro. Si quieres, puedes orar brevemente así: “Te doy gracias, Padre celestial, por medio de Jesucristo, tu amado Hijo, porque me has protegido durante esta noche de todo mal y peligro, y te ruego que también durante este día me guardes de pecados y de todo mal, para que te agrade todo mi obrar y vivir; pues en tus manos me encomiendo a mí mismo, mi cuerpo y mi alma y todo lo que tengo. Tu santo ángel me acompañe para que el maligno no tenga ningún poder sobre mí, Amén.” -Y luego dirígete con gozo a tu labor, entonando quizás un himno, o lo que tu corazón te dicte.

Por la noche, cuando te retires a descansar, te santiguarás y dirás así: “En el nombre de Dios Padre, Hijo y Espíritu Santo, Amén”. Entonces, puesto de rodillas o de pie, dirás el Credo y el Padre nuestro. Si quieres, puedes orar brevemente así: “Te doy gracias, Padre celestial, por medio de Jesucristo, tu amado Hijo, porque me has protegido benignamente en este día, y te ruego que me perdones todos mis pecados, donde cometí un mal, y me guardes benignamente en esta noche; pues en tus manos me encomiendo a mí mismo, mi cuerpo y mi alma y todo lo que tengo. Tu santo ángel me acompañe para que el maligno no tenga ningún poder sobre mí. Amén”. Luego descansa sin más y tranquilamente.

Cómo el jefe de la familia debe enseñar a los de su casa la bendición y acción de gracias:

Tanto los niños como los criados se acercarán a la mesa con las manos juntas y reverentemente, dirán así: “Los ojos de todos esperan en ti, Señor, y tú les das su comida a su tiempo. Abres tu mano y colmas de bendiciones a todo ser viviente”. Luego recitarán el Padrenuestro y esta oración: “Señor Dios, Padre celestial: Bendícenos y bendice estos tus dones, que de tu gran bondad recibimos. Por Jesucristo, nuestro Señor”. Amén.

Acción de Gracias.

Así también, después de haber comido, dirán igualmente con reverencia y con las manos juntas: “Dad gracias al Señor, porque es bueno; porque para siempre es su misericordia. Él da alimento a todo ser viviente; a la bestia su mantenimiento, y a los pequeños cuervos que claman. No se deleita en la fuerza del caballo, ni se complace en la destreza del hombre. Se complace el Señor en los que le temen, y en los que esperan en su misericordia”. Entonces orarán el Padrenuestro, añadiendo la siguiente oración: “Te damos gracias, Señor Dios Padre, por Jesucristo, nuestro Señor, por todos tus beneficios: Tú que vives y reinas por todos los siglos”. Amén.

Tabla de Deberes

Algunos versículos bíblicos para todos los santos órdenes y estados. Para que ellos mediante un pasaje que les concierna sean exhortados para su función y oficio.

A los obispos, a los pastores y a los predicadores

“Es necesario que el obispo sea irreprensible, marido de una sola mujer, sobrio, prudente, decoroso, hospedador, apto para enseñar, no dado al vino, no pendenciero, no codicioso de ganancias deshonestas, sino amable, apacible, no avaro; que gobierne bien su casa, que tenga a sus hijos en sujeción con toda honestidad (pues el que no sabe gobernar su propia casa, ¿cómo cuidará de la iglesia de Dios?) no un neófito”, etc. Esto lo encontramos en el cuarto capítulo de la primera epístola a Timoteo.

Deberes de los cristianos frente a sus maestros y pastores.

Comed y bebed lo que os den; porque el obrero es digno de su salario, (Lc. 10:7)

“Así también ordenó el Señor a los que anuncian el evangelio, que vivan del evangelio”( 1Co. 9:14). “El que es enseñado en la palabra, haga partícipe de toda cosa buena al que lo instruye. No os engañéis; Dios no puede ser burlado (Gál. 6:6). “Los ancianos que gobiernan bien, sean tenidos por dignos de doble honor, mayormente los que trabajan en predicar y enseñar.

Pues la Escritura dice: No pondrás bozal al buey que trilla”(1 Tim. 5:17). Asimismo, “El obrero es digno de su salario” (Lc. 10:7); “Os rogamos, hermanos, que reconozcáis a los que trabajan entre vosotros, y os presiden en el Señor, y os amonestan; y que los tengáis en mucha estima y amor por causa de su obra. Tened paz entre vosotros” (1 Tes. 5:12). “Obedeced a vuestros pastores, y sujetaos a ellos; porque ellos velan por vuestras almas, como quienes han de dar cuenta; para que lo hagan con alegría, y no quejándose, porque esto no os es provechoso”(Heb. 13:17).

De la autoridad Secular

“Sométase toda persona a las autoridades superiores; porque no hay autoridad sino de parte de Dios, y las que hay, por Dios han sido establecidas. De modo que quien se opone a la autoridad, a lo establecido por Dios resiste; porque no en vano lleva la espada, pues es servidor de Dios, vengador para castigar al que hace lo malo “ (Rom. 13:1 y siguientes).

Deberes de los súbditos hacia la autoridad.

Dad a César lo que es de César, y a Dios lo que es de Dios". (Mt. 22:21). “Sométase toda persona a las autoridades superiores”, etc (Rom.13:1). Por lo cual es necesario estarle sujetos, no solamente por razón del castigo, sino también por causa de la conciencia. Pues por esto pagáis también los tributos, porque son servidores de Dios que atienden continuamente a esto mismo. Pagad a todos lo que debéis; al que tributo, tributo; al que impuesto, impuesto; al que respeto, respeto; al que honra, honra" (Rom. 13: 5-7). “Exhorto ante todo, a que se hagan rogativas, oraciones, peticiones y acciones de gracias, por todos los hombres; por los reyes y los que están en eminencia, para que vivamos quieta y reposadamente en toda piedad y honestidad” (1 Tim. 2:1 y siguientes). Recuérdales que se sujeten a los gobernantes y autoridades, que obedezcan, que estén dispuestos a toda buena obra”. (Tito 3:1) “Por causa del Señor someteos a toda institución humana, ya sea al rey, como a superior, ya a los gobernadores, como por él enviados para castigo de los malhechores y alabanza de los que hacen bien”(1 Pe. 2:13).

A los maridos

“Vosotros, maridos, igualmente, vivid con ellas sabiamente, dando honor a la mujer como a vaso más frágil, y como a coherederas de la gracia de la vida, para que vuestras oraciones no tengan estorbo”(1 Pe. 3:7). “No seáis ásperos con ellas”(Col. 23:19).

A las esposas

“Vosotras, mujeres, estad sujetas a vuestros maridos; como al Señor, como Sara obedecía a Abraham, llamándole señor; de la cual vosotros habéis venido a ser hijas, si hacéis el bien, sin temer ninguna amenaza” (1 Pe. 3:1).

A los padres

“Y vosotros, padres, no provoquéis a ira a vuestros hijos, sino criadlos en disciplina y amonestación del Señor” (Efe. 6:4; Col. 3:21).

A los hijos

“Hijos, obedeced en el Señor a vuestros padres, porque esto es justo”. “Honra a tu padre y a tu madre, que es el primer mandamiento con promesa; para que te vaya bien, y seas de larga vida sobre la tierra”. (Efe. 6:1-3).

A los siervos, siervas, jornaleros, trabajadores, etc.

“Siervos, obedeced a vuestros amos terrenales con temor y temblor, con sencillez de vuestro corazón, como a Cristo; no sirviendo al ojo, como los que quieren agradar a los hombres, sino como siervos de Cristo, de corazón haciendo la voluntad de Dios; sirviendo de buena voluntad, como al Señor y no a los hombres, sabiendo que el bien que cada uno hiciere, ése recibirá del Señor, sea siervo o sea libre”(Efe. 6:5-8).

A los amos y amas

“Vosotros, amos, haced con ellos lo mismo, dejando las amenazas sabiendo que el Señor de ellos y vuestro está en los cielos, y que para él no hay acepción de personas”. (Efe. 6:9).

A la juventud en general

“Igualmente, jóvenes, estad sujetos a los ancianos; y todos, sumisos unos a otros, revestios de humildad; porque Dios resiste a los soberbios, y da gracia a los humildes. Humillaos, pues, bajo la poderosa mano de Dios para que él os exalte cuando fuere tiempo” (1 Pe. 45:5 y siguientes).

A las viudas

“La que en verdad es viuda y ha quedado sola, espera en Dios, y es diligente en súplicas y oraciones noche y día. Pero la que se entrega a los placeres, viviendo está muerta” (1 Tim. 5:5 y siguientes).

A todos los cristianos en común

“Y cualquier otro mandamiento, en esta sentencia se resume: Amarás a tu prójimo como a ti mismo” ( Rom.13:9). “Exhorto ante todo, a que se hagan rogativas, oraciones, peticiones y acciones de gracias, por todos los hombres".

Cada uno aprenda lo suyo y nada irá mal en la casa.